27/4/09

BIM. Building Information Modeling


BIM es el acrónimo de Building Information Modeling (modelización de la información del edificio), un tipo de programa CAD que permite construir en lugar de dibujar. Desde el punto de vista de la construcción sostenible, las ventajas que conlleva utilizar este tipo de programas son, de momento, pocos. Afortunadamente la situación está cambiando rápidamente y las ventajas potenciales son enormes.


Los principales argumentos de venta de este tipo de aplicaciones son el incremento de la productividad y la seguridad de que todos los planos son coherentes entre sí. Cuando definimos un proyecto con un programa BIM, normalmente trabajamos en planta, tal y como lo haríamos dibujando con el programa CAD habitual, pero como que definimos los elementos (muros, ventanas, etc.), en lugar de dibujar líneas, al final obtenemos un modelo 3D de nuestro edificio. Las ventajas son claras: de forma automática obtenemos las fachadas y todas las secciones que consideramos oportunas. Tan sólo debemos definir en qué punto queremos cortar y el programa se encargará de hacer el dibujo de la sección. Si hemos definido correctamente el proyecto, la mayoría de mediciones también se pueden obtener de forma automática.

Lo que aún no acostumbra a ser un argumento de venta son las ventajas ambientales que puede comportar utilizar un programa BIM en fase de proyecto:

Si tenemos una base de datos de productos con sus características ambientales, como los Kg. de CO2 o m3 de agua necesarios para su fabricación, podemos determinar fácilmente algunos parámetros del impacto ambiental de la construcción del edificio. A medida que se realizan modificaciones en el proyecto, se actualizan automáticamente los valores de impacto ambiental. Evidentemente sería necesaria la cooperación de los fabricantes de los productos para poder tener una base de datos con valores realistas.

La simulación energética de los edificios, tan costosa para la mayoría de usuarios de LIDER y CALENER, se podría realizar de forma automática, sin tener que volver a definir el edificio. Actualmente ya hay empresas que están tramitando el reconocimiento de sus programas (como AX-3000), que permiten obtener la certificación energética que define el Real Decreto 47/2007, mediante un proceso casi automático, a partir del edificio definido con un programa BIM. La mejora ambiental no es ahorro de tiempo, sino que los arquitectos pueden proyectar teniendo en cuenta el consumo energético del edificio.

En los últimos años todos los profesionales de la construcción hemos comprobado que los trámites y comprobaciones que se deben hacer al proyectar y construir un edificio se incrementan constantemente, un hecho bien lógico si se pretende mejorar la calidad de la edificación, pero que dificulta la fase de proyecto y ejecución. Utilizar correctamente la tecnología disponible hoy en día, en este caso los programas BIM, permitiría hacer comprobaciones automáticas de una parte muy importante de la normativa vigente. Si hemos construido un edificio virtualmente, incluso con un emplazamiento real situado geoespacialmente, no sería complicado pasar el archivo de nuestro proyecto por un validador creado por la Administración que comprobase, por ejemplo, si la altura del último forjado es la reglamentaria según la situación del edificio, si la instalación solar es la requerida por la ordenanza solar del municipio o si la demanda energética cumple la normativa vigente. ¿Ciencia ficción? De ninguna manera. Actualmente los usuarios de programas BIM pueden cargar el archivo del edificio al web de Green Buildin Studio y obtener la certificación LEED de los Estados Unidos. En este video se pueden ver cómo un usuario utiliza el Green Building Studio para calcular las emisiones de CO2 del edificio creado con Revit y mejorar algunos parámetros a partir de las recomendaciones que hace el webservice.

Sería muy interesante para la Administración tener la libertad de aumentar la normativa tanto como haga falta sin tener en cuenta el incremento de tiempo que supone para los profesionales rellenar más formularios; sin embargo aún estamos lejos de que la normativa se valide de forma automática. El primer paso es que los estudios de arquitectura utilicen los programas adecuados, ya que a partir de los ficheros de Autocad nunca será posible hacer estas comprobaciones.

Los principales programes BIM que se encuentran actualmente en el mercado son el Revit (Autodesk), el Archicad (Graphisoft) y el Allplan (Nemetschek). Estos dos últimos ya hace muchos años que se comercializan y tienen una comunidad de usuarios bien consolidada en el mundo entero. Revit, a pesar de ser el último en llegar, ha entrado en el mercado con la seguridad que supone proceder de la misma compañía que el famoso Autocad.

En el ámbito de usabilidad, los tres programas son bastante similares, lo que es de agradecer porque demuestra que la idea de BIM está bien definida y consolidada. Tanto respecto a precios como a módulos de ampliación sí que hay diferencias importantes entre los tres programas, pero deberá ser el usuario final quien decida cuál le conviene más según sus necesidades o preferencias. Desde la Agenda de la Construcción Sostenible nos limitaremos a hacer una llamada a las compañías para que maximicen la compatibilidad entre sus programas, ya que esta política es la que más beneficiará a los usuarios y les convencerá de hacer el cambio hacia un método de trabajo que, en última instancia, facilitará la adopción de criterios ambientales en los proyectos de edificación.

1 Comentário:

etsase dijo...

El Lider y el Calener son los únicos programas que el ministerio reconoce para la emisión de la Certificación Energética de Edificios. Hay muchas empresas interesadas en que su programa se reconozca y técnicos en poder usar programas más versátiles, pero hasta que el ministerio no los reconozca no queda otra que aguantarse con lo que hay.

Publicar un comentario

AIA+S © 2008. Template by Dicas Blogger.

TOPO